Cáritas ha exigido al Gobierno de Navarra "la retirada inmediata" de la orden foral que regula el sello socialmente comprometido, al entender que es "un claro paso hacia la privatización de la atención a los desfavorecidos", con lo que la organización no está "en absoluto de acuerdo".
este miércoles en rueda de prensa el delegado de Cáritas en Navarra, Angel Iriarte, quien ha comparecido junto con la delegada de Manos Unidas en la Comunidad foral, Asunción Orbe, quien también ha sido crítica con este sello, que no solicitará para su organización.
Este sello ofrece incentivos fiscales a quienes contribuyan a financiar proyectos socialmente reconocidos por el Gobierno de Navarra. Así, con este certificado la deducción fiscal para los donantes es del 40 por ciento, mientras que sin el sello es del 25 por ciento.
En su intervención, Iriarte se ha posicionado en contra de este sello, que no van a solicitar, y ha argumentado que "para que un proyecto lo obtenga hay que hacer lo que quiere el Gobierno", ya que "él determina qué tipos de proyectos pueden obtenerlos, si lo planificado lo merece, y valora si el resultado es de su agrado". "Para obtener el sello, hay que pasar por el aro, hay que someterse al Gobierno de turno", ha asegurado.
Aunque el representante de Cáritas ha indicado que su organización no se opone a los incentivos fiscales, se ha preguntado "si es tiempo de aumentar o establecer nuevas desgravaciones fiscales cuando el Gobierno tiene sus arcas debilitadas", así como "si ha habido un clamor popular pidiendo esta medida".
Además, ha cuestionado que sea el Ejecutivo foral "el que tenga que certificar la eficacia, eficiencia y transparencia de Cáritas". "¿Son los que están pagando la Renta de Inclusión Social con unos retrasos escandalosos y los que tardan en dar una ayuda de emergencia semanas los que van a juzgar si las entidades sociales somos eficaces, eficientes y transparentes?", se ha preguntado.
A este respecto, Iriarte ha apuntado que "Cáritas lleva muchos años paliando las ineficacias e ineficiencias" del Gobierno y también ha destacado que cuando su organización ha firmado el convenio para adelantar la Renta de Inclusión Social no se les ha exigido tener el sello.
La convocatoria al sello, ha insistido, "es formalmente una subvención financiada con dinero privado y con control público". Iriarte ha expuesto que Cáritas "no ha basado nunca su financiación y viabilidad en la financiación pública porque necesita la independencia para ejercer su función".
"No vamos a renunciar ahora a ello con el sello y porque nos condicionen con perder o ganar donantes con el incentivo fiscal. Solicitarlo supondría renunciar a nuestra independencia", ha asegurado. Cáritas cuenta en Navarra con 3.304 socios y a cierre de 2012 tuvo 4.192 donantes.
CÁRITAS, "AL BORDE" EN LA ATENCIÓN Por otra parte, Iriarte, preguntado por la situación de Cáritas en general, ha destacado que en la actualidad está "al borde de no poder responder" a la demanda social que se le pide. Así, ha asegurado que "es la peor situación desde hace décadas".
En los nueve primeros meses de este año, ha informado el delegado de la organización, Cáritas ha atendido en Navarra a 6.387 unidades familiares y les ha aportado ayudas por más de 1,4 millones de euros. En el mismo periodo de 2012, atendió a mil familias menos.
Además, ha puesto de relieve que han ayudado a 125 unidades familiares a acceder a una vivienda de alquiler, haciéndoles préstamos para afrontar los avales que se les exige, y en lo que va de año han realizado 2.691 adelantos de la Renta de Inclusión Social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario